Ningún antibiótico, por sí solo, logra la erradicación intracelular del microorganismo, y por ello se utilizanen combinaciones diversas con efecto sinérgico o aditivo, administradas durante varias semanas para reducir en lo posible la aparición de recidivas.
Cuando éstas se presentan, la bacteria mantiene una sensibilidad antibiótica idéntica a la del episodio inicial, por lo que puede tratarse nuevamente con una pauta antibiótica similar18.
Los objetivos del tratamiento son:
Cuando éstas se presentan, la bacteria mantiene una sensibilidad antibiótica idéntica a la del episodio inicial, por lo que puede tratarse nuevamente con una pauta antibiótica similar18.
Los objetivos del tratamiento son:
- Acortar el periodo sintomático de la enfermedad.
- Evitar la aparición de complicaciones focales o secuelas.
- Disminuir las recidivas.
Valoración de la eficacia
La clave para valorar la eficacia de los tratamientos en la brucelosis es el número de fallos terapéuticos y recidivas que presenta cada pauta terapéutica.
Los fallos terapéuticos se definen como la persistencia o agravamiento de los síntomas después de un periodo que oscila entre 2 y 6 semanas (la terminación habitual de muchas de las pautas ensayadas).
La proporción de fallos, en pacientes que cumplen correctamente el tratamiento, depende fundamentalmente de la existencia de enfermedad focal, sobre todo de espondilitis u otras localizaciones que incluyan abscesos19.
La recidiva en pacientes cumplidores, depende de la pauta de tratamiento empleada (tipo de antimicrobiano y duración), el tiempo de evolución de la enfermedad, la presencia de hemocultivo positivo y una temperatura elevada en el momento de la evaluación inicial 7,8. La recidiva se suela presentar en las primeras semanas o meses tras terminar el tratamiento (más del 80% en los 6 meses siguientes del final del tratamiento).
La clave para valorar la eficacia de los tratamientos en la brucelosis es el número de fallos terapéuticos y recidivas que presenta cada pauta terapéutica.
Los fallos terapéuticos se definen como la persistencia o agravamiento de los síntomas después de un periodo que oscila entre 2 y 6 semanas (la terminación habitual de muchas de las pautas ensayadas).
La proporción de fallos, en pacientes que cumplen correctamente el tratamiento, depende fundamentalmente de la existencia de enfermedad focal, sobre todo de espondilitis u otras localizaciones que incluyan abscesos19.
La recidiva en pacientes cumplidores, depende de la pauta de tratamiento empleada (tipo de antimicrobiano y duración), el tiempo de evolución de la enfermedad, la presencia de hemocultivo positivo y una temperatura elevada en el momento de la evaluación inicial 7,8. La recidiva se suela presentar en las primeras semanas o meses tras terminar el tratamiento (más del 80% en los 6 meses siguientes del final del tratamiento).
Principio básicos del tratamiento.
- El diagnóstico de brucelosis debe estar bien fun - damentado Se debe valorar la existencia de enfermedad focal o de complicaciones y descartar gestación.
- Se debe explicar al paciente el curso previsible de la enfermedad, las complicaciones potenciales, la necesidad de un tratamiento prolongado y la importancia de su cumplimentación.
- La selección de los antimicrobianos más apropiadospara el tratamiento de la brucelosis debe basarse en resultados de ensayos clínicos, además de tener en cuenta los estudios realizados in vitro o en modelos animales.
- Es importante conocerque algunos antimicrobianos con buena actividad in vitro y en modelos animales no han sido necesariamente efectivos en el tratamiento de la brucelosis humana.
- El tratamiento requiere cursos prolongados preferiblementecon una combinación de antibióticos.
- Se debe incluir al menos un fármaco con una buenapenetración intracelular.
0 comentarios:
Publicar un comentario